Un año desde entonces...

El 12 de enero de 2010, a las 21:53 UTC (16:53 en el horario local) Haití fue golpeado por un terremoto de magnitud 6.9 en la escala Richter, el terremoto más severo del país en 200 años. El epicentro del temblor fue cerca de la capital Puerto Príncipe. Se ha estimado que el número de muertos llegó a 200.000 personas y más de 1 millón quedaron damnificados.

Después de un año todos aquellos que prometioron dar ayuda a Haití ya la dieron pero solamente en el momento del suceso para quedar bien con el resto de países mundiales. En las notícias informaron que solo habían recojido el 10% de la runa causada por el terremoto. Las condiciones en las que se encuentran los ciudadanos haitianos es nefasta, en un reportaje un hombre el cual estaba afectado por el seísmo contó que se tenían que adaptar a las condiciones que tienen hoy en día. Han pasado de una ciudad civilizada a un país del tercer mundo (cualquiera diría que evolucionamos hacía atrás). También recuerdo una niña atendida  (que por casualidad he encontrado una foto de ella, la que veis más arriba) por los enfermeros de ayuda, la pobre niña sufria de colera y cuando ya medianamente estaba bien volvía a casa con su madre. Pero lo que me impacto de verdad es que el colera se obtiene mediante la mala higiene y las aguas estancadas y la niña al no tener zapatos fácilmente padecerá de nuevo la enfermedad.

 Cosas así me hacen plantearme en la clase de mundo en que vivimos, y a veces desearía que hubiera más gente con corazón y pusiera su granito de arena para contribuir a cosas parecidas. Ya me gustaría ser lo suficiente valiente como marcharme hasta allí o a cualquier otro sitio que se encuentre en una situación parecida. Pero los únicos que de verdad pueden contribuir no són gente ni como yo ni como tu, deben ser las personas poseedoras de poder o dinero, que con un poquito de ayuda entre todos se puede conseguir mucho más.

En recuerdo de esas personas inocentes que perdieron la vida sin ningún motivo.